sábado, 14 de abril de 2012

hola de nuevo

Después de tanto tiempo ausente he decidido volver ha escribir, a los pocos que me leáis os pido disculpas por esta larga pausa, últimamente he estado ocupado y demasiado cansado con el trabajo, como para ponerme a escribir sobre lo gilipollas que puedo llegar a ser algunas veces, o lo mierda que puede llegar a ser la vida cuando todo esta en tu contra y te ves sin amigos y/o familiares cerca que te respalden.   Últimamente he estado trabajando con un propósito, mantener mis pensamientos a raya, pensamientos como siempre negativos, como no, intento mantenerme alegre de cara la galería (publico), pero últimamente cuesta mantener esa falsa alegría cuando todo te da absolutamente igual, cuando tienes ganas de mandar a toda la gente de tu alrededor a la mierda y decirles  que no vuelvan a dirigirte mas la palabra ya que te causan mas problemas y dolores de los que ya tenias antes.        He vuelto a escribir porque necesitaba desahogarme sin que nadie me juzgara por ello, como suelen hacer mis conocidos y familiares. Aprovecho que estoy puesto para contaros que he estado haciendo durante estos meses de silencio escrito, aparte de trabajar estuve tentado un par de veces a jugar al juego del ahorcado (para quien no lo sepa es el juego ese donde te tapas las vías de respiración hasta que te quedas inconsciente), también estuve tentado en tener un solitario accidente de coche en uno de mis viajes al país vecino (Francia), también han habido cosas buenas, pocas pero buenas, como tener a mi perro de devuelta conmigo, seguir trabajando ( tener trabajo en este momento es una alegría ya que te da sensación de seguridad) y poca cosa más, ya que estoy inspirado y las palabras salen solas por mis manos, os voy a contar uno de mis muchos dolores de cabeza (espero que ha vosotros no os los de yo después de leer esto), el fin de semana pasado después de trabajar decidí ir ha ver a una de mis compañeras de trabajo, ya que ha esta la habían destinado ha otro local, al principio no tenia ganas de ir pero me acabaron por convencer, ya que me dijeron que a la chica le haría gracia verme, tonto de mi fui, la verdad es que no le disgusto verme pero tampoco se lo tomo demasiado bien, estuve charlando un rato con ella, y eso que al irme le comento si le gustaría que volviera al día siguiente, ella respondió enseguida que si que le gustaría y que no le importaría, hay gilipollas de mi, eso que al día siguiente fui a verla con un par de dulces que me habían regalado, cuando me voy ya puso mala cara, y cuando vio los dulces todavía fue peor, decidí quedarme un rato para relajarme y pensar (la verdad es que no recuerdo en que pensaba en ese mismo momento, pero seguro que era en lo gilipollas que fui, por no ver en que la tía se había quedado conmigo el día antes, seguro que se partiría de risa con sus amigas, contándoles como me había tomado el pelo, pues resulta que ya no me acordaba de esto hasta que no me lo ha recordado una conocida del trabajo, ya que resulta que han estado hablando de lo que hago y dejo de hacer mientras trabajan (por lo visto soy un buen tema de conversación mientras no este delante), buen gente he de irme, ya que mañana tengo que trabajar y son la una pasadas, que os vaya bien todo.

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